¿Cómo Sobrevivir al Trauma después de
una Catástrofe Natural?

Sobrevivir al Trauma Después de un Catástrofe Natural o Humanitaria es importante para tratar de prevenir el daño o minimizar las consecuencias del Trastorno de Estrés Postraumático (TEPT).

Palabras Clave: Dana, Valencia, Trauma, Culpa, Daño, Trastorno de Estrés Postraumático (TEPT).

Antes de nada, esta entrada de blog, no pretende ofrecer ningún tipo de solución mágica, ni ser una receta ante el sufrimiento o el dolor emocional.

Solo el tiempo y la gestión del mismo, permitirá «reconstruir» los cimientos de lo que el agua devastó.

Por desgracia, no todo es recuperable, como es el caso de todas las vidas que se ha cobrado esta tragedia que ha asolado mi tierra en los últimos días.

El propósito, es visibilizar y concienciar acerca de las consecuencias que tiene estar expuestos y vivir una situación traumática y cómo podemos hacer un afrontamiento adecuado de la misma.

«Quizás, el objetivo de estar bien ante un episodio de esta magnitud, en estos momentos, sea prematuro y precipitado»

 Es ilógico e irracional pensar que es el momento de estar bien, cuando aún no hemos tenido tiempo si quiera de estar mal, asimilar la información u ocuparnos de las necesidades más básicas y fundamentales.

Probablemente, muchas de las personas afectadas, aún no han tenido tiempo para conectar verdaderamente con estas emociones, ni todavía son conscientes de las repercusiones del desastre.

Es normal que las emociones transiten desde la alegría o el agradecimiento (por estar vivos), hasta el miedo (por las consecuencias), la tristeza (por las pérdidas), el dolor más profundo ( por víctimas) la impotencia (sensación de vulnerabilidad), la frustración (abandono institucional), la incomprensión o incluso la culpa (por no poder evitar la desgracia).

Diferencias Individuales en la Gestión Emocional ante una situación de Crisis

Me parece fundamental incluir este aspecto, ya que si algo he aprendido en estos años trabajando con personas, es que no todas las personas gestionamos las emociones, ni los sentimientos del mismo modo.

«No todos sufrimos igual. Ni mejor, ni peor, simplemente tenemos estrategias de afrontamiento muy diferentes a la hora de procesar la información».

Por eso, no podemos, ni mucho menos, obligar a la gente que ha perdido todo, o simplemente están afectados de alguna forma por la situación a estar bien o considerarse afortunados por no haber perdido su vida.

Del mismo modo, tampoco podemos sentirnos culpables, ni responsabilizarnos de «nuestra suerte», por no haber sufrido en primera persona las consecuencias de la Dana. («Culpa del Superviviente»)

¿Qué es Trastorno de Estrés Postraumático? (TEPT)

En los próximos meses, escucharemos hablar mucho de la palabra Trastorno de Estrés Postraumático (TEPT) en los medios de comunicación o en las redes sociales.

El Trastorno de Estrés Postraumático (TEPT) es una condición de salud mental que surge en personas que han vivido o experimentado un evento traumático. Aunque no necesariamente un desastre natural.

En términos psicológicos, para medir o acreditar el daño moral, el diagnóstico diferencial o la evaluación psicológica que lo acreditaría, responde a la etiqueta diagnóstica de Trastorno de Estrés Postraumático.

Causas del Trastorno de Estrés Postraumático (TEPT)

Las causas del TEPT suelen estar relacionadas con experiencias que generan un alto nivel de estrés y miedo.

Algunos desencadenantes comunes:

• Desastres naturales o humanitarios
• Eventos traumáticos o violentos
• Abuso físico o psicológico
• Pérdida de un ser querido

La probabilidad de desarrollar TEPT aumenta cuando se incrementan la intensidad, duración y/o frecuencia del agente estresante y cuando este es experimentado directamente en primera persona.

Síntomas del Trastorno de Estrés Postraumático (TEPT)

Según el manual Diagnóstico DSM-V el TEPT presenta la siguiente sintomatología:

1. Intrusión caracterizado por «revivir el evento traumático de manera involuntaria»
   • Flashback: recuerdos angustiosos recurrentes.
   • Pesadillas sueños angustiosos relacionados con el trauma.
   • Pensamientos intrusivos: recuerdos del evento traumático sin aviso.
   • Malestar psicológico intenso y reacciones fisiológicas derivadas del trauma.
2. Evitación de Situaciones Asociadas al Trauma
   • Aislamiento social: evitar actividades sociales o familiares por recuerdos asociados al suceso(s) traumático(s).
   • Evitar lugares o actividades que despierten recuerdos o pensamientos angustiosos.
3. Alteraciones en el Estado de Ánimo
   • Pensamientos negativos sobre uno mismo: culpa, vergüenza o inutilidad.
   • Dificultad para recordar aspectos del trauma: olvidar detalles importantes.
   • Desinterés en actividades: pérdida del interés en hobbies o participar en actividades sociales.
   • Percepción distorsionada de la causa o consecuencia: creer que la culpa es de uno mismo o de los demás-
4. Hipervigilancia y Reactividad
   • Hipervigilancia: estar siempre n guardia y pendiente del entorno.
   • Reacciones exageradas: responder con sobresaltos o miedo ante ruidos inesperados.

Es normal que la sintomatología derivada del Trastorno de Estrés Postraumático, pueda asemejarse o incluso comparta sintomatología con otros trastornos como la ansiedad o depresión.

Diagnóstico del Trastorno de Estrés Postraumático:

Para elaborar un diagnóstico adecuado del TEPT, es fundamental acudir a un profesional de la salud mental.

Realizar una evaluación detallada y hacer un diagnóstico diferencial, es importante para identificar los síntomas y descartar otros posibles trastornos.

Tratamiento del Trastorno de Estrés Postraumático:

Para que cualquier tratamiento sea eficaz, ha de ser personalizado, ya que los síntomas y las causas pueden variar en función de cada individuo y sus circunstancias.

Aunque el dolor que sentimos, muchas veces es irreparable, compartirlo es terapéutico y eficaz.

«El objetivo inicial de la terapia, no va ser recobrar la normalidad en sí, sino más bien, procesar la información, entender y conectar con las emociones derivadas del trauma en un espacio seguro para poder prevenir los daños».

La Terapia Cognitivo-conductual es de las terapias más efectivas para el TEPTP, buscando restructurar pensamientos, modificar creencias disfuncionales y sustituir comportamientos poco adecuados, asociados al trauma.

También podemos beneficiarnos de otros enfoque como el Humanista, la Terapia de Exposición y la Terapia de Aceptación y Compromiso.

Terapias de Apoyo o los Grupos de Autoayuda pueden jugar un papel importante. Puesto que el entorno y el apoyo social percibido, son factores determinantes en la recuperación del TEPT.

En algunos casos, si los síntomas fisiológicos son muy agudos y persistentes, puede requerir de algún tipo de tratamiento médico o farmacológico, de forma puntual si los síntomas no remiten.

Prevención de Daños respecto al Evento Traumático

No siempre está en nuestra mano evitar el daño, ni podemos tener todo bajo control. No obstante, pueden existir algunas estrategias que ayuden a reducir el riesgo después de un evento traumático.

1. Buscar apoyo Inmediato: hablar sobre el evento con amigos, familiares o profesionales ayuda a procesar el trauma.
2. Practicar técnicas de Relajación: para algunas personas, esto puede ser beneficioso y reducir el estrés, para otras incluso contraproducente.
3. Realizar Actividades Físicas: el ejercicio físico además de los innumerables beneficios que tiene, ayuda a reducir la ansiedad y a mejorar el estado de ánimo.
4. Acudir a Terapia en Fase Temprana: la intervención temprana por parte de un profesional, puede ayudar a mitigar los síntomas ya prevenir el desarrollo del TEPT.

Recomendaciones a Afectados por la Dana de Valencia

Lógicamente, el tiempo es necesario para procesar la información y poder cicatrizar las heridas.

Cada caso y cada situación es distinta, por lo que no podemos generalizar, ni existe una receta que funcione para ayudar a todo el mundo.

En muchos casos, volver a la “normalidad” puede no ser una expectativa razonable, al menos a corto plazo. Por lo que debemos tener unas expectativas moderadas y ajustadas a la realidad.

«En muchas ocasiones, no se tratará de volver a la normalidad, sino de construir desde cero una nueva realidad».

Aquellas personas que han perdido a algún familiar o ser querido, sin duda, se han llevado la peor parte.

Cuesta imaginar, la sensación de dolor y desasosiego que pueden experimentar las víctimas cuándo no saben si quiera dónde están los cuerpos de sus familiares o seres queridos.

Por otro lado, no quiero olvidarme de todas aquellas personas que, aunque no han sufrido daños físicos, autónomos o pequeños empresarios, han perdido su fuente de ingresos e inclusos sus viviendas.

Y por último, de todos los que trabajan para atender a los demás de forma íntegra y honesta.

Recomendable dosificar la información que llega a través de medios de comunicación y redes sociales.

Estar hiperconectados, genera sentimiento de comunidad, pero no está exento de riesgos. Revivir constantemente y estar expuestos de manera incesante a la información pude agravar y perpetuar el daño.

Conclusiones

El Trastorno de Estrés Postraumático afecta a millones de personas de todo el mundo. Según los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que cerca del 4% de la población mundial ha tenido TEPT.

Como comentábamos, no necesariamente tenemos que experimentar un desastre natural para experimentar TEPT, sino que puede surgir de estar expuestos a una situación que nos provoque daño.

Afortunadamente, con los medios y recursos disponibles, el tratamiento necesario y el apoyo adecuado, es posible la recuperación del mismo.

Si estás afectado o conoces a alguien que pueda estar en esta situación, no dudes en buscar ayuda profesional.

Para situaciones como la acontecida por la Dana de Valencia, se han habilitado muchos recursos asistenciales gratuitos.

Desde la página web del Colegio Oficial de Psicólogos de Valencia, podemos encontrar información disponible sobre los recursos e iniciativas asistenciales e informarnos sobre fuentes de carácter oficial.